LOS ZAPATOS MARY JANE

Un siglo y una década después de su aparición, este icono del calzado sigue en lo más alto de las listas de ventas. Su historia es sinónimo de tendencia.

Se llaman Merceditas –Mary Janes para las anglosajonas– y son el último objeto de deseo de las coleccionistas de zapatos. Si en 2002 las favoritas eran las de charol negro de Manolo Blahnik, con las que soñaban Sarah Jessica Parker y todas las seguidoras de Sexo en Nueva York, hoy las más codiciadas son las de Prada que ha sacado una versión ideal y súper divertida combinando colores llamativos y muy atractivos. Han sido las estrellas en el desfile de este invierno.



Un poco de historia..
Sin embargo, la historia de este fetiche con nombre de mujer empezó a escribirse en el siglo XIX, e irónicamente gracias a las astucias de un hombre. Fue el dandi inglés George Brummel, árbitro de la elegancia en la corte del rey Jorge IV, quien puso de moda los pumps (o zapatos de salón) como calzado de noche.

En España, este calzado también entró en la corte e incluso fue testigo de una trágica historia de amor. De hecho, debe su nombre a la desventurada reina María de las Mercedes de Orleans, apodada popularmente bajo el nombre de Merceditas.
Su primo Alfonso XII y ella se enamoraron a primera vista y se casaron en enero de 1878. La reina murió por enfermedad apenas cinco meses después, con tan solo 18 años; y al desconsolado rey le dedicaron una canción popular, ¿Dónde vas Alfonso XII?, en la que este icono del calzado quedó inmortalizado en una de las estrofas: «Los zapatos que llevaba / eran de rico charol / que se los regaló Alfonso / el día que se casó».

El nombre inglés proviene de un personaje de Buster Brown, una popular tira cómica dibujada por Richard Felton Outcault y publicada en 1902 por The New York Herald, en la que los protagonistas, Buster y su hermana Mary Jane, llevaban merceditas negras de charol. En 1904, apenas dos años después de su publicación y aprovechando el tirón internacional del cómic, el autor vendió una licencia a la Brown Shoe Company para comercializar este tipo de zapatos con el nombre de uno de sus personajes.



En los años 20 las  merceditas –por fin con tacón– se convirtieron en la mejor pareja de baile de la mujer. Era una cuestión práctica: la tira impedía que el zapato saliera disparado al desenfrenado ritmo del charlestón o del claqué. En los años 60, otra revolución generacional hizo tambalear los cimientos de la sociedad europea; esta vez, sin tacones. Las baby doll se rebelaron contra la sofisticación de las mujeres de la década anterior, vestidas con el uniforme de su infancia: faldas cortas y merceditas planas.

Con los años 90 llegó Kate Moss y el triunfo de una nueva belleza, flaca y descarnada, Kate se convirtió en la antítesis de las supermodelos. Un estilo que subió a la pasarela a niñas desamparadas, vestidas con mezclas imposibles y calzadas con Merceditas.


Este invierno han vuelto a resurgir con mucha fuerza gracias al increíble diseño modernizado de Prada. Es imposible que pasen desapercibidas y todo el mundo debería de tener unas en su armario. 

¡Cómprate unas y hazlas tuyas!




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